CAPITULO 1.

21 de Junio. Fin de curso al fin. Todos esperábamos este día con ilusión. Tres minutos. Solo quedaban tres minutos para que ese odioso sonido, si el del timbre, desapareciese para el resto del verano. La ultima vez que lo escucharía. Así si. Verano. Vacaciones. Dormir. Descansar. Quedar con los amigos sin importar la hora. Venga ya. Eso es perfecto...

-TRES. DOS. UNOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO. -Toda la clase hicimos la cuenta atrás, esos tres segundos.

Y por fin.... El espantoso "RIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIING" sonó por el pasillo. Todos nos levantamos del asiento sin dejar terminar su frase al profesor. Las clases habían terminado. Mis notas habían salido perfectas. Lo cual no tendría que volver a recuperar. Vale, nunca he sido buena estudiante, he mentido en mi biografía, he sido de cinco justos, pero que mas da. El caso es que había aprobado.Y me esperaba un verano caluroso, pero perfecto en las piscina de mi urbanización. Salimos todos corriendo de esa cárcel que el mundo insiste en llamar instituto. Parecíamos salvajes. Pero el verano ya estaba aquí. Y había que disfrutarlo.

Me dirigí a mi urbanicacion y allí... en la puerta... NOS ESPERABA MI MADRE CON LAS MALETAS EN LA PUERTA.

Bueno hay un dato que no he dado, por que siempre me ha dado, no se, pena. O a saber que. Y es que mis padres están divorciados. Y... ADIÓS A MIS PLANES EN LA PLAYA. No lo pone pero mi localidad es Alicante. Si. Soy alicantina. Mi padre vive en un barrio, que no se como se llama. EN LEÓN. Vamos. Perfecto. Yo y mi hermano lejos de este sitio. joder, este sitio es perfecto. ¿Por que tiene que estar mi padre tan lejos?

Cogí mi maleta. Mi madre había metido en ella toda mi ropa de verano. Dejé mi mochila a mi madre y me fui a la estación de tren. Para colmo iríamos en tren hasta León. PODRÍAMOS IR EN AVIÓN. Da igual. No me pude despedir de Sara así que le mandé un Whatsapp: "Tía, que no podemos quedar en todo el verano. Me voy de Alicante..."

Enseguida me contestó, parecía que estaba esperando el mensaje.

Decía: "JODER TÍA... Esta bien... pero ten en cuenta que el día que menos esperes ahí estaré. No lo dudes."

Esta tía está loca. Es capaz de presentarse.

Llegó el tren. Pablo y yo nos subimos. Un poco tristes. Nos esperaba el verano mas caluroso... Lejos de mi playita...

Unas largas horas de viaje. Pablo y yo ya no sabíamos que hacer. POOOOOOOOOOOORFIN llegamos. Estaba un poco mareada, pero al ver a mi padre allí a lo lejos es como que me animé un poquillo. Pero el verano acababa de empezar y yo iba a estar lejos de mis amigos. De mi playa... pero bueno al lado de mi padre. Y... y... ¿QUIEN ES ESA?

Mierda. Mi padre se ha echado novia. Joder.. no puede ser, si hace solo un año estaba con mi madre... y ahora está con esa... ¿Guarra?

Seguro que le busca por su dinero, será que no me conozco yo bien a ese tipo de tías. Vienen. Los enamoran. Les sacan el dinero. Y cuando están en la ruina... PAP les rompe el corazón. Y no quiero que mi padre sufra por culpa de esa.

Corrí hacia él y le abracé.

-PAPAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

No pude contenerme. Tenia que abrazarlo. Tenia que besarlo. Tenia que decirle que le quiero. Llevo medio año sin verlo. 

-Hola Princesa. -A pesar de mi edad, seguía siendo su princesa. -Te presento a Amalia. Mi... mi...

-Tu novia. -Dijo Pablo muy borde.

-Si... pero Pablo...

-Papa, llevame a casa y dejemoslo ah. -Volvió a contestar seriamente Pablo. La verdad es que a ninguno de los dos nos caía bien la Amalia esa.

Media hora de viaje. Había media hora de la estación a la casa de mi padre.

-Bueno... pues aquí estamos. Esta es mi habitación. Aquí dormiréis vosotros...
-¡COMO QUE NOSOTROS! -Gritemos mi hermano y yo a la vez.
-Es que... ahí duerme Hugo, el hijo de Amalia...
-Papa, no me jodas macho. Siempre hemos dormido la enana y yo en habitaciones separadas.
-Eh, que somos mellizos.
-Pablo, controla tu boquita.
-No marees. Me voy a esta habitación y punto. No voy a compartir habitación. Nunca lo he hecho, ni lo haré. -Coge sus cosas y las tira sobre la cama.
-Solo hasta que se venga su hijo de Londres.
-Papa... no. Joder, esta es tu casa. No tenemos por que compartir habitación. Que duerma en el sofá. -Dije algo cabreada. Me metí a mi habitación y subí el volumen de la música. Lo que me faltaba un hermanastro.
Seguro que es un friki empollón de esos.